El garbanzo es una legumbre versátil, de sabor y textura suave en su cocción, que puede emplearse para una infinidad de platos. Es uno de los ingredientes estrella en la cocina hindú y muchas de sus recetas tuvieron tal éxito que lograron traspasar las fronteras e instalarse en otras culturas gastronómicas. El hummus es, tal vez, el mejor ejemplo de ello.

Snacks saludables y con proteínas: perfectos para ganar masa muscular

Como acompañamiento, junto a guarniciones, para untar panes y carnes, en las picadas y como snack, el hummus es siempre una excelente opción. Además de su suavidad y textura, es una pasta rica en nutrientes. Los garbanzos, a base de los cuales se prepara, son ricos en vitamina C y vitamina B6. Cada 100 gramos de granos, hay 7 gramos de proteína y 7.6 gramos de fibra.

Es una buena alternativa de fibra para personas con diabetes ya que ayuda a mantener los niveles adecuados de azúcar en la sangre por lo que se recomiendan de 20 a 25 gramos al día para las mujeres y de 30 a 38 gramos para los hombres.

Cómo hacer el hummus más cremoso

Si alguna vez preparaste hummus casero, es probable que hayas deseado que salga un poco más cremoso. Es que el garbanzo molido, triturado o pisado suele conservar algunos grumos, pero nada es imposible si conocés todos los secretos para que la pasta te quede mucho más suave.

Los expertos indican que hay dos puntos destacados. En primer lugar, la hidratación. Los garbanzos deben dejarse en remojo mucho tiempo, al menos 12 horas para que se hidraten correctamente y se ablanden. El resto del trabajo lo hará la cocción.

Por otra parte, un truco que pocos están dispuestos a seguir pero que marca la diferencia, es sacar la piel a los garbanzos. Si ya pasaron unas horas en remojo, podés aprovechar para hacer un cambio del agua fría a agua tibia y, en medio, presionar suavemente los garbanzos para ir quitándoles la piel poco a poco. Quitar esa fina capa que los recubre deja directamente expuesta la carne de la legumbre.

Otras personas eligen suavizar su hummus mediante el uso de ingredientes. Uno de los preferidos, que además forma parte de la receta original, es el aceite de oliva. También se tiene en cuenta el agua agregada que se añade para que la mezcla no quede tan pastosa. Por último, los más innovadores se atreven a agregar unas cucharadas de queso crema: las suficientes para dar cremosidad, sin cambiar el sabor.

Paso a paso para hacer hummus

1. Remojar 250 gramos de garbanzos durante 12 horas. Quitarles la piel cuando pase este tiempo o entre remojo si cambiás el agua

2. Hervir los garbanzos durante una hora o hasta que estén lo suficientemente blandos como para poder pisarlos o mixearlos

3. Pasar a un bowl el garbanzo y mixear con la minipimer. También se puede usar una procesadora.

4. En un pequeño bowl, mezclar un diente de ajo cocido o pasta de ajo con una cucharada de tahini o de semillas de sésamo. Agregar sal y pimentón. En caso de agregarle queso crema, es recomendable hacerlo en este paso

5. Mezclar bien los ingredientes y exprimirles el jugo de un limón. Después esta mezcla debe incorporarse al garbanzo pisado y volver a mezclar todo para que se forme una sola pasta